"La gente se arregla todos los días el cabello. ¿Por qué no el corazón?" Proverbio chino
Mayoría de la población pide indultar a Fujimori, según Ipsos Apoyo
Domingo, 18 de Diciembre 2011 | 9:25 am
EFE
Si el presidente Ollanta Humala decide indultar al exmandatario por razones humanitarias el 66% de los encuestados estaría de acuerdo, y solo el 30% no lo estaría.
La última encuesta de Ipsos Apoyo Opinión y Mercados revela que un 42% de la población peruana está a favor de indultar al expresidente Alberto Fujimori, considerando su actual estado de salud.
Solo el 27% opina que el exmandatario debe continuar preso en la cárcel de la Dirección de Operaciones Especiales (Diroes), en Ate Vitarte, donde cumple carcelería desde el 2007, agrega la encuesta realizada entre el 14 y 16 de diciembre último.
El 26% considera que debe concedérsele arresto domiciliario, mientras que al 5% o no le interesa el tema o no precisa.
En ese sentido, si el presidente Ollanta Humala decide indultar al exmandatario por razones humanitarias el 66% de los encuestados estaría de acuerdo, y solo el 30% no lo estaría.
Cabe señalar que la familia Fujimori ha anunciado su deseo de solicitar el indulto para el expresidente.
Sin embargo, el gobierno ha manifestado que no está en agenda otorgar este beneficio a Fujimori, quien padece de cáncer en la cavidad bucal, además de diversas enfermedades propias de su edad.
Ficha técnica Encuesta nacional urbana fue realizada a pedido del diario El Comercio a 1200 personas. Tiene un nivel de representatividad de 75.2%, un margen de error de +/- 2.8% y un nivel de confianza de 95%.
SOLO UNA CARTA DE NAVIDAD… HOLA PAPA NOEL POR FANNY JEM WONG
Hoy no quiero escribir un poema… Hoy solo quiero escribir una carta. Una carta real como cada letra que he escrito a lo largo de este tiempo, en sentimiento y emoción. Una carta, que aunque resulte extraña para algunos y para otra absurda, quiero compartir con quién la desee leer, una carta de Navidad.
Callao, 08 de Diciembre del 2005 09.45 PM. Lima –Perú
Hola Papá Noel Soy Fanny Jem Wong, supongo que me recuerdas… Aunque hace tannnnnnnnnnto tiempo que no te escribo…
¿Sabes?
-Las Navidades hace mucho que dejaron de ser bonitas para mí. Ya no tengo a mi papá cerca. Debes conocerlo, se llama Julio Víctor Wong Espinoza más conocido como Wong Wu Yong "El Guerrero Valiente".
-¿Ahora te acuerdas? -Dime que siiiiiiiiii. Supongo que mi padre estará en uno de tus enormes talleres del Polo Norte, preparando juguetes para otros niños.
A él, le encantaba la carpintería y hacer muñecos de trapo. Debe ser, uno de los mejores trabajadores en tus talleres y debe también llevarse bien con los duendes que allí laboran, ya que es muy cordial y gran amigo porque, conoce el valor de la lealtad.
Aunque pienso que, podría quizás estar cuidando a los venados, porque adoraaaaaaa a los animales y es muy cariñoso con ellos.
Danzador, Saltador, Donero, Blitzeno, Cometa y Cupido estarían felices en compañía de mi padre.
Te cuento Santa una vez papá me dijo: -Si yo fuese millonario, quisiera tener una casa en un terreno enormeeeeee para tener un par de perros de cada rasa, que exista en el mundo.
Luego rectifico y dijo: -Mejor una granja, así también tendría conejos, pollitos, patos……… Muchas flores y árboles frutales de todos los tipos y un pequeño lago, con miles de peces.
– Entre nos Santa…No sé si eso era tan cierto porque, siempre me dejo tener perros. Es másssssssss hubo un tiempo que tuve once. – ¡Siiiiiiiii! once aunque no lo creas. -También periquitos australianos, una pareja hámster llamados Napoleón y Josefina y a todos sus hijos que fueron catorce.
-Ardillas, una rata blanca enorme, llamada Lulú.
-Vayaaaa me olvidaba de Priscilo, mi pequeño ratón blanco. Comía chocolates y comida china, tenía una casa en forma de circo de techo colorado.
-Pero cuando una vez aparecí con July un mono, papá casi me vota de casa jaaaaaaaaa.
La historia de esa mona fue tristeeeee y conmovida le ofrecí todooooooo el dinero que tenía a un organillero, para que me lo vendiera y lo hizo.
Fue una hazaña llevarlo a mi casa, encima la mona se me trepo en la cabeza y me hizo puffffffff sobre ella.
Llegué a casa hecha un asco pero, contenta.
Papá dijo: -¿Estas loca? -¿Un mono? -¡Noooooooooooo! -Te lo llevas al zoológico -Mañana mismo.
-En fin con el dolor de mi corazón, doné el mono al Parque de las Leyendas, pero la verdad es que en un solo día que paso en mi casa, rompió muchas cosas.
-Una desgracia total.
-Arturo mi esposo que en ese tiempo era mi novio me acompaño en mi dolor de regalar a July la mona.
-Bueno Santa te sigo contando
-Recuerdo que papá un año cuando salió de vacaciones, se paso un mes completo recortando moldes y fabricó a mano muchos muñecos para mí.
.Todavía tengo varios
-¡Era increíble!
Me hizo una pareja de patilargos con zapatos de fieltro negro, cabellos de motas y trajes muy coloridos con muchas blondas.
-Todavía los tengo y están como nuevos, los cuide por años.
También tengo un burro de paño lenci muy negro, con alforjas tejidas en lamas coloradas.
-Un canguro rosado y un pequeño pirata de gamuza que ya esta tuerto. Los demás se perdieron en el tiempo pero, se quedaron en mis memorias.
-Como colecciono muñecas y muchas otros cachivaches, fue mi padre quién preparó todas las repisas en donde se exhiben.
El decía:
-No te haré ni una más
-Ya está tu cuarto está muy lleno de cachivaches
-¿Dónde vas a meter más?
-Esto no parece un dormitorio
-Parece una tienda
Pero al ver mi cara de luna enfadada me decía:
-Buenoooooo -¿Dónde pongo otra?
-Pero tú compras tus maderas
-¿Y para qué será esta vez?
-Osos, payasos, búhos, bolas de nieves, unicornios, más muñecas -¿o qué?
Y se reía…….. Es más, cierro los ojos y lo veo sonriéndome
Santa la Navidad en mi casa era mi padre, cuando murió se llevo la Navidad en sus alforjas. Era él quien desde los primeros días de noviembre armaba conmigo el árbol, el nacimiento y todo lo demás.
Planeábamos que se cenaría y yo ponía en la mesa todos los antojos de papá, que eran muchos por cierto porque era muy comelón.
Algo que me enseño desde muy pequeña, fue siempre compartir la cena con alguna persona que no tuviera nada y así se hizo siempre en casa. Alistábamos lugares de más para así hacerlo.
Papá nos enseñó que la navidad no eran los regalos, porque estos en sí mismos carecen de valor. Me enseñó que un regalo valía por significado y no por su precio. Y que si no se podía regalar algo, un abrazo y un beso eran mucho más valiosos
Siempre quise tocar piano, mi padre no podía comprarme uno de verdad. Pero si me pudo dar mi primer piano de cajita musical y años más tarde un pequeño órgano.
-Para nosotros la Navidad era la unión de la familia y la simbología del nacimiento del Niño Jesús. Aunque no te niego que siempre tuve todo, a diferencia de tantos niños que no tienen nada, ni siquiera algo que comer.
-Tuve muchas, muchas navidades hermosas las cuales agradezco porque fui afortunada.
-Perdóname Santa, te debo haber mareado con todo mi rollo, ahora si te diré que es lo que te pediré para esta Navidad.
-Lo primero, que en cada hogar del mundo se encienda una luz para cada familia que exista.
-Para mí si puedes, deseo que te lleves parte de la tristeza que tengo dentro, porque me pesa demasiado.
-Arrójala muy lejos en un abismo, para que nunca más regrese.
-Permíteme soñar que estoy allá ti, que me encuentro con mi padre y lo ayudo como siempre en la fabricación de los juguetes o preparando los dulces para los niños del mundo.
-Pero si no puede ser, lo único que te pido y no es para mí es que le digas a Dios que no se lleve un día de Navidad, al papito de ningún niño del mundo como se llevo al mío.
-Eso es todo lo que deseo, si puedes concedérmelo.
Adiós Santa, gracias por leer mi carta.
Un besoteeeeeeeeeee
FANNY JEM WONG
PD.
A quienes la lean resultará quizás infantil lo que acabo de escribir pero es lo que siento, después de casi ocho años de la muerte de mi padre. Él me prometió no morirse en Navidad y cumplió su promesa.
El 24 de Diciembre, se sentó por última vez a la mesa. No pudo cenar, tenía mucho dolor. Ya no podía comer, solo pesaba 32 kilos pero nos acompaño.
La mañana del 25 de diciembre de ese año salió de casa conmigo para una clínica y no regreso. Falleció catorce días después.